La selección batió a Alemania en cinco sets, al iniciarse la cuarta semana de la XXI Liga Mundial de voleibol. Italia cedió ante Francia en París…
El elenco cubano de voleibol superó este viernes a su similar de Alemania, en cinco sets (25-23, 17-25, 26-24, 23-25 y 15-13), y se mantuvo al frente del grupo D en la XXI Liga Mundial, ahora con balance de seis éxitos, un fracaso y 15 unidades.
Las acciones se desarrollaron en la Arena Trier, de la ciudad germana del mismo nombre, durante poco más de dos horas, y estuvieron animadas por una discreta afición de alrededor de dos mil espectadores, de acuerdo al sitio oficial del evento.
El choque resultó bastante disputado, aunque marcado por altibajos en el rendimiento a un lado y otro de la cancha, así como por la gran cantidad de errores cometidos por dos elencos que discuten con fiereza el pase a la final de Córdova, Argentina, a fines del mes de julio.
El DT cubano Orlando Samuel colocó como titulares a los auxiliares Wilfredo León y Joandry Leal, el acomodador Raidel Hierrezuelo, el líbero Gustavo Álvarez, el opuesto Fernando Hernández, y los centrales Roberlandy Simón e Isbel Mesa, este último en sustitución de Osmany Camejo, al parecer en busca de más opciones ofensivas por el centro de la cancha.
La presencia de Gustavo se debió a que el líbero principal Keiber Gutiérrez sufre un esguince grado 1, que lo mantendrá fuera del trazado por lo menos hasta la serie ante Polonia, el fin de semana próximo.
El timonel de los teutones, el argentino Raúl Lozano, colocó como regulares a Björn Andrae, Lukas Bauer, Marcus Böhme, Robert Kromm, Patrick Steuerwald, György Grozer y el líbero Ferdinand Tille.
El primer parcial del juego mostró a una selección nacional bastante concentrada, de buen ritmo y con un líder ofensivo claro en la figura de Leal. Su recepción funcionó sin grandes tropiezos y Simón aportó también en el trabajo sobre la net y a la ofensiva.
Sin embargo, en la segunda manga el recibo antillano se vino abajo y fue muy difícil organizar el complejo uno (recibo, pase, ataque), además de que se notaron demasiado los pobres aportes de Fernando, Isbel y León, este último pieza clave y para quien se vaticinaba a esas alturas otro partido gris.
Entonces Samuel ingresó a Rolando Cepeda como cruzado y a Camejo como central, pero no hubo manera de variar la suerte del set.
En el tercero las cosas se recompusieron un tanto, ya que Cepeda aportó la mayoría de sus puntos en el partido, León apareció un tanto más, y porque fue Alemania la que entonces falló una y otra vez en el ataque y el servicio. Ese fragmento de juego no estuvo exento de las flaquezas cubanas, sobre todo en la recepción y el saque, ya no solo en suspensión sino también con el llamado flooting.
La historia del cuarto set fue muy dura para los cubanos, pues la aspiración de llevarse los tan necesarios tres puntos se esfumaron ante reiterados errores en dos renglones de juego fundamentales (recibo y ataque), más imperdonables errores a la hora de concretar varios contraataques, algunos de los cuales pudieron inclinar la pizarra a su favor definitivamente. Tampoco pudo detenerse a Groser y ello dio un respiro a los germanos.
Mas el último parcial reservó una reacción letal de los visitantes, quienes han salido victoriosos en los tres tie break jugados por ellos en la presente Liga. Y si alguien mereció aplausos en esa definición fue León, pues lideró el ataque, estampó dos puntos directos por servicio, y conformó varias “murallas” bloqueadoras que detuvieron a Groser y compañía.
Con esa actuación, León resultó el máximo anotador de Cuba con 18 puntos, seguido por Leal y Simón, con 13 y 14 respectivamente. También sobresalió Hierrezuelo con sus cinco unidades por bloqueo.
El líder anotador del pleito fue Groser con 26 tantos, secundado en su elenco por Kromm (19) y Andrae (10).
Las estadísticas indican que los cubanos atacaron para un discreto 45,45 por ciento, con 21 errores en ese renglón; consiguieron 13 bloqueos, para aceptable 2,6 por set; marcaron seis puntos directos con el saque (votaron 20), defendieron más de siete balones por parcial y recibieron excelentemente en el 53 por ciento de las oportunidades. Sobre este último dígito cabe recalcar que resulta positivo de manera global, aunque las recaídas fueron muy costosas. Urge más estabilidad en este sentido.
Los alemanes nos superaron en ataque (49,57 %) y sobre todo en recibo excelente con un galáctico por ciento de 79,7. Su efectividad en saque fue similar, y más discretas las estadísticas en bloqueo (2.40 ps.) y defensa de campo (4.20 ps.).
En cuanto a errores no forzados, los visitantes acumularon 34 por 32 los anfitriones.
Tras este desenlace, la tabla de posiciones en el grupo D tiene a Cuba como líder con 15 unidades, seguido por Alemania con 13, Polonia con nueve y Argentina con dos. Ambas selecciones se volverán a medir este sábado, jornada en la que también lidiarán polacos y gauchos en la sede de los primeros. La llave debe calentarse mucho más luego de estos resultados.
En esta fecha de viernes, la sexteta de Italia cedió ante Francia en París por 2-3 sets (25-19, 19-25, 20-25, 25-17 y 13-15) y de seguro salió muy preocupada, ya que Serbia se ha ido hasta China en pos de dos éxitos que la afirmen al frente del apartado B.
Por otra parte, Rusia blanqueó (3-0) a Egipto en El Cairo y sigue como único invicto del evento (7-0/ 20 pts.), ya con el pasaporte en la mano, sin muchas dudas, aunque Estados Unidos pretende recortar distancia ante Finlandia en sus predios.
Este sábado habrá juegos en siete ciudades del planeta.
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