Los cubanos recibiremos en breve al año 2010, con la esperanza de que sus 12 meses traigan felicidad, prosperidad, paz y alegrías para todo nuestro pueblo.
En el año 52 de la Revolución, nacida por sobre la falsa república en 1959, el sentido común deberá imponerse en pos de que cada nuevo paso ponga por delante el bienestar de la nación y sus hijos, aquellos que por sobre todas las cosas han resistido tantos años de carencias y dificultades, convencidos de que el proyecto socialista es la vía más adecuada para el desarrollo y la supervivencia.
Ojalá estos doce meses traigan progreso real y mucha felicidad, esa que ciertamente se construye de modo particular en cada rincón de la vida, y sin la cual no es posible soñar y crear.
A mis familiares todos, a los amigos de siempre, a quienes alguna vez estuvieron muy cerca y hoy están lejos (pero en el fondo nos seguimos queriendo), a los compañeros de trabajo y lucha, les deseo mucha paz y felicidad; mucha prosperdidad y un poco de suerte, que esa siempre hace falta.
En el año 52 de la Revolución, nacida por sobre la falsa república en 1959, el sentido común deberá imponerse en pos de que cada nuevo paso ponga por delante el bienestar de la nación y sus hijos, aquellos que por sobre todas las cosas han resistido tantos años de carencias y dificultades, convencidos de que el proyecto socialista es la vía más adecuada para el desarrollo y la supervivencia.
Ojalá estos doce meses traigan progreso real y mucha felicidad, esa que ciertamente se construye de modo particular en cada rincón de la vida, y sin la cual no es posible soñar y crear.
A mis familiares todos, a los amigos de siempre, a quienes alguna vez estuvieron muy cerca y hoy están lejos (pero en el fondo nos seguimos queriendo), a los compañeros de trabajo y lucha, les deseo mucha paz y felicidad; mucha prosperdidad y un poco de suerte, que esa siempre hace falta.
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